¿Qué habrá sido de aquella chica de nuestro instituto con la que nos dimos el primer beso y de la que no hemos vuelto a saber nada? ¿Qué hay de ese chico que vemos cada mañana en el autobús, escuchando música con cascos y con la mirada distraída? ¿Y esa joven que nos miró en la discoteca y se perdió en la noche? ¿O ese repartidor que viene de vez en cuando a nuestra empresa a reponer la máquina de café? Buscar personas en redes sociales es un deporte tan practicado como poco reconocido. En esta guía, te vamos a mostrar algunos trucos que pueden serte de mucha utilidad.
Hay muchas personas por las que nos sentimos atraídos o por las que sentimos curiosidad. Y de hecho, son muchos los que están atentos a las «señales» que les lleven a esa persona especial, a su media naranja o, al menos, a una bonita historia de amor.
Contenido
- 1 Herramientas y trucos
- 2 Posibles consecuencias. No digas que no avisamos
- 3 BONUS: Mejores redes donde «pescar»
HERRAMIENTAS Y TRUCOS
Quizás, si os gusta una chica o un chico que veis a menudo o con el cual os cruzasteis alguna vez, o echáis de menos a alguna persona del pasado… podría ser interesante establecer contacto, tener una cita, ir a cenar, al cine, de viaje a Cuba…. Pero STOP!!! volvamos al principio insensatos.
Ahora, gracias a internet, contamos con los medios para hacerlo sin tener que romper el hielo en el metro a las 8 de la mañana en día laborable. Obviamente, se trata de personas con las que no tenemos amigos en común, a priori, y no hay manera sutil de llegar a ellas o de encontrar su perfil en redes porque nos falta información.
Las herramientas son muy variadas y complejas y algunas hasta asaltan nuestra privacidad. Sin ir más lejos, Recognizr, la app que te facilitaba los perfiles de redes a partir de una fotografía, fue ilegal prácticamente desde el minuto uno. Este artículo no va de eso. Para ello ya tenéis algunos como 15 herramientas para encontrar personas en redes sociales de Webespacio o este con herramientas para buscar gente en redes de Hipertextual. Este artículo habla más de trucos concretos, de estrategias y tretas más elaboradas para encontrar a personas dentro de las propias redes sociales (Facebook e Instagram sobre todo), con las posibilidades que dichas redes nos ofrecen.
Ahora os vamos a enumerar una serie de trucos para poder encontrar a estas personas de forma sencilla. Depende sobre todo de los datos de los que dispongamos de la persona (aunque sean escasos, algún dato necesitamos si pretendemos llegar a buen puerto).
SABES SU NOMBRE Y APELLIDO
En el grupo 1 están aquellas personas de las que sabemos su nombre y apellidos. Puede ser un antiguo compañero de colegio, una cliente de nuestra empresa o una vecina y gracias a nuestra memoria, a su tarjeta de visita o a su buzón tenemos esos datos, valiosos sí, pero no significa que esto nos lo vaya a poner fácil a la hora de encontrarlos en redes sociales. Son muchos los que utilizan alias, diminutivos y un sinfín de argucias para que nadie les encuentre. ¡Para eso estamos nosotros, para ayudaros a obtener el éxito!
Suele haber 5 opciones muy utilizadas y recurrentes:
- Iniciales apellidos: Sin duda la más utilizada es la del nombre completo seguido de las iniciales de los apellidos. Por ejemplo Felipe Constante Molinos se pondría como Felipe CM. María Isabel Gorro Santa como María Isabel GS. Muchísimos usuarios de Facebook optan por esta opción. Más de los que puedes imaginar.
- Primeras sílabas de apellidos: en este caso optan por las primeras sílabas. En los casos de arriba sería Felipe ConsMo y María Isabel GoSan.
- Consonantes apellido: Felipe Cnstnt, María Isabel Grr. Este tipo de personas suelen ser unas frikis de cuidado.
- Traducciones al inglés o francés… y otros idiomas claro; por ejemplo, versiones en inglés: Philip Constant Windmills y Mary Elisabeth Hat Saint.
- Nombres al revés. Epilef y Airam Lebasi en este caso. Estos le dan la espalda a Lucifer así que andaos con ojo.
Luego existen infinidad de posibilidades más y ahí si que nos lo ponen más complicado porque aunque pueden utilizar sencillos diminutivos como Maribel, Pi o Koke, también pueden ponerse motes o alias, escoger apellidos ingleses al azar o de personajes icónicos como Supertramp o Murdoch. Quizás es que realmente no quieren ser encontrados por nadie. Muy importante esto último.
Es básico saber que en Facebook por ejemplo, se puede acotar la zona en la que realizamos la consulta: ciudad, pueblo, región, etc. Quizás así podáis dar con alguien de esos que no desea ser encontrado. ; )
SABES SU NOMBRE Y COINCIDES EN ALGÚN SITIO
En el grupo 2 situamos a aquellas personas con las que coincidimos frecuentemente en algún sitio como puede ser en el gimnasio, en la piscina, en el autobús, viene a nuestro trabajo a traer correspondencia o suele comer en los mismos restaurantes que nosotros. Sin embargo, somos tímidos y no nos atrevemos a hacer algo más allá que mirarle con cara de bobos.
Es posible que sepamos cómo se llama porque algún bendito ser humano haya pronunciado su nombre a una distancia perfecta para que nuestros oídos registren la información. Esto es muy probable en el citado caso del restaurante, en el que a lo largo de una comida con compañeros de trabajo se puede mencionar varias veces el nombre del comensal que tenemos en frente. También en el gimnasio o si se trata de alguien que viene al trabajo de forma frecuente, porque algún compañero quizás sí nos pueda facilitar su nombre.
Así pues, si sabemos que acude con asiduidad a nuestro gimnasio y tenemos el nombre (que no el apellido), una opción sencilla es entrar en la página de Facebook del gimnasio, a la que seguramente le habrá dado a me gusta para estar al tanto de la parrilla de entrenos y otras novedades, promos, etc y comenzar a revisar las publicaciones subidas por el propio gimnasio. Quizás le ha dado a me gusta a alguna foto o ha hecho un comentario. Si vemos un nombre que coincida con el suyo solo tenemos que pinchar para ver si la foto se corresponde con la persona a la que buscamos.
En el caso de que no tengamos el nombre, dato difícil de conseguir por ejemplo en el transporte público (generalmente la gente viaja sola) o en la piscina, en la que se está tomando el sol en silencio y la gente suele poner su toalla a una distancia prudencial del resto de personas… ha llegado el momento de tomar una medida improvisada aunque útil.
Geolocalización de Instagram: la app de fotos por excelencia no permite buscar acotando región como Facebook pero si que permite consultar las fotos que se han subido en un lugar concreto. Si por ejemplo ves a esa persona haciéndose fotos con los amigos en la piscina municipal te recomendamos que rastrees la red minutos después, en concreto en las fotos subidas desde ese lugar, para ver si la han subido a Instagram y con suerte puede que hasta esté etiquetado. En el caso del bus o metro, si tienes la suerte de que la persona que te cruzas cada tarde al volver de la universidad, sigue montada más paradas que tú, más o menos tengas tendrás acotada la zona de la ciudad en la que vive. Consulta fotos subidas desde esos lugares.
Por último, siempre nos queda observar, como hacía el bueno de Sherlock Holmes. Como le vas viendo de vez en cuando, quizás algún día tengas la suerte de que lleve un libro de Osho en la mano, por lo que te recomendamos buscar en Facebook a gente de la facultad de filosofía de tu ciudad y con suerte puede que aparezca en alguna foto con otros filosofos de medio pelo. O si lleva un libro de Pascal, tendrás que buscar en la facultad de Ingeniería.
Si lleva una mochila de un equipo deportivo, pues entra en la página de Facebook de dicho equipo y a ver si está etiquetado en alguna foto, o incluso puedes revisar nombre por nombre los laiks de las últimas publicaciones. O si siempre pasea con su galgo rescatado por un parque, es muy probable que siga en Facebook a protectoras de animales… Esto empieza a ser una cuestión de fe, pero a veces suena la flauta.
NO SABES NADA, ES INENCONTRABLE. PREPÁRATE PARA AFINAR
En el grupo 3 están los inencontrables y es que aquí las esperanzas de éxito se reducen de forma drástica. Se trata de personas que hemos visto en un concierto de música Indie en una discoteca de moda, en una obra de teatro, una noche en un restaurante de Varsovia o en un avión regresando de Túnez pero de la que no sabemos ni siquiera su nombre. Generalmente ha habido un cruce de miradas, un eye contact intenso que nos hizo sentir algo. No es cuestión de ir buscando a todos los guapos y guapas que nos hemos ido cruzando, sino a aquellos con los que ha saltado una chispa, por mínima que sea. Toca hacer pues, un brindis al sol.
Nuestro principal problema radica en que no tenemos ni un solo dato de la persona. Solo indicios y vagos recuerdos. Si ni siquiera tenemos nada de eso será mejor que nos vayamos olvidando porque por desgracia no disponemos de una máquina del tiempo que nos permita volver atrás porque de ser así, a buen seguro, viajaríamos al pasado para decirle que han pasado los días y todavía seguimos obsesionados con su mirada.
De nuevo hay que tratar de recordar todo lo que podamos: si le escuchamos hablar en italiano, el plato al que le hizo foto en el restaurante o si volviendo de Túnez iba en chanclas en plan playero.
Estas búsquedas son magia negra y rara vez funcionan, estáis avisados. Hacer este ejercicio latoso y no hacer nada normalmente desemboca en el mismo resultado, pero existen casos (conocidos por nosotros) en los que han servido para iniciar una relación sentimental que todavía perdura.
Pongamos el ejemplo del concierto de música Indie. ¿Hay evento en Facebook? Pues accede lo antes posible y te toca revisar fotos y likes. Es una tarea que solo persiguen los perseverantes, pero lo somos ¿verdad? En caso de que no haya habido suerte te toca buscar el hashtag en Instagram y cruzar los dedos porque salga en una foto con alguien. Quizás no esté etiquetado, pero tenemos el nombre de su amigo, o de alguien que aparece en la foto con él. Tenemos un hilo del que tirar. Podemos buscar a este susodicho en Facebook e igual allí si que encontramos al que estamos buscando. Quizás sea chic@ Facebook y no chic@ Instagram.
Vamos al caso de la obra de teatro… puede parecer que no, pero ya sabemos que le gusta el teatro y eso es mucho decir. Incluso si vuelves a una obra similar en unas semanas quizás te vuelvas a encontrar a esa persona. Pero vamos a la redes que es lo que nos atañe: busca con el localizador de Instagram las fotos que se han subido desde ese teatro y comprueba perfiles. La gente joven que va al teatro suele posturear con fotos a tutiplén en plan soy cultutera que te cagas. Los hashtags de la obra también son un buen método.
Restaurante de Varsovia. Recuerdas vagamente que pidió Zurek… la sabrosa sopa de centeno y carne, y le tomó una estudiada foto desenfocando el fondo para darle envidia a sus amigos. Pues ahora teclea el hashtag del restaurante y date un paseo por las fotos en busca de zureks, también puedes buscar #zurek y cruzar los dedos para que se alineen los astros. Pero es que además, en la comida la escuchamos hablando en un italiano nativo… Quizás sea un estudiante de Erasmus… Página de Italianos en Varsovia… allá que vamos!!!!!
Último caso, turista que regresa de Túnez y que tiene poca pinta de haber visitado el desierto. Todavía lleva arena húmeda en los talones. Te toca buscar hashtags #beachtunez #beachtunisia o geolocalizar las playas más populares de ese país y esperar a que haya subido una foto. Esto es como disparar una bala hacia Marte y acertar, pero la esperanza es lo último que se pierde.Por ejemplo, en Praga todo dios sube una foto con el reloj lunar… pero eso sí, más vale que hayan pasado pocos días desde que os cruzasteis la mirada porque en caso contrario, tendrás miles de fotos que revisar y quizás para que al final todo ese esfuerzo se pierda con un «leído e ignorado».
Por supuesto, estos métodos nos pueden ayudar a encontrar a la persona en las redes, aunque puede que lo que nos respondan no sea lo que esperamos.
POSIBLES CONSECUENCIAS. NO DIGAS QUE NO AVISAMOS
Cada uno de los tres grupos de los que hemos hablado aquí puede tener sus probabilidades de éxito. Aquí te dejamos una aproximación y una estimación del riesgo que corres en cada uno de los casos.
AUNQUE SEPAS SUS DATOS, NO SABES LO QUE QUIERE
En el grupo 1, todo lo que tenemos a favor en forma de datos personales, lo tenemos en contra porque la otra persona no necesariamente ha mostrado interés alguno o ni siquiera se acuerda de nosotros: la adolescente del colegio que tanto nos gustaba ahora tiene dos hijos y un marido peludo. La cliente de nuestra empresa es lesbiana y el vecino dice que miau a nuestras pretensiones de que nos acompañe a pasear al hurón.
NO SABES NADA, PERO ESO PUEDE SER BUENO
Paradójicamente, con el grupo 2 es donde más probabilidades hay de éxito una vez localizada la persona en redes, porque son personas con las que hemos hecho eye contact en el bus o en el gimnasio en reiteradas ocasiones, días, semanas… y se puede palpar que algo hay, cierta tensión sexual no resuelta flota en el ambiente. Seguramente se alegrará al recibir tu mensaje. Este es el grupo de los afortunados y muchas historias de amor comienzan así.
CUIDADO CON PARECER UN OBSESO. MANTÉN LA DIGNIDAD
El grupo 3 es en el que más opciones tenemos de tener algún problema con la justicia. Esa persona del concierto de indie no sabe ni quién eres, es más, por no recordar ni siquiera recuerda nada en absoluto de aquella noche… (le debieron de echar algo en la bebida, como siempre).
La de la obra de teatro pondrá una mueca torcida al ver que la has encontrado dios sabe cómo y leerá tu mensaje en el que le explicas que le miraste desde la penumbra del gallinero mientras marca el 091 en el inalámbrico. Realmente, ni siquiera te miró.
El o la de Varsovia cree que sus compañeros de Erasmus le están gastando una novatada y te bloquea en ese mismo instante. Sin piedad. Tiro en la frente. Vaya por dios!! después de la paliza que te has pegado por encontrarle. En cualquier caso, no pensabas volver a Polonia…
La turista de Túnez o el viajero de Praga te responden educadamente y un poco intrigados… son gente de mundo y nunca pierden la oportunidad de comunicar. Aunque no tienen ni una mísera idea de dónde se han cruzado contigo. De repente se angustian al pensar en lo mal que está la gente del mundo y en lo solas que se sienten las personas, te mandan un emoticono de corazón por compasión… horas después te bloquean con delicadeza y se retiran a leer a Paulo Coelho con un pañuelo de amargura.
¡Buena suerte a todos!
BONUS: MEJORES REDES DONDE «PESCAR»
La metáfora es fácil, lo sabemos. Hay que tener en cuenta que cada red social tiene unas características propias. Tienes que pensar en la persona y hacer un ejercicio de razonamiento y de intuición. Te dejamos aquí algunas claves:
1. FACEBOOK
Si está en Facebook, estás de enhorabuena. En esta red están la mayor parte de las personas, de hecho, cuenta con 2000 millones de usuarios activos, lo que alcanza más o menos a ¡una cuarta parte de la población mundial! y la proporción aumenta en zonas como Europa. Los eventos y las páginas son lugares en donde podemos encontrar usuarios siguiendo las pistas que dejan esas personas en la vida real: ubicaciones en las que los vimos, que lleve una bolsa de un club de boxeo, si acude al restaurante italiano regentado por Carletto etc . Además, salvo que los usuarios tengan muy capado su perfil, podremos ver algunas fotos a tamaño grande (normalmente las de perfil) para confirmar que es la persona que buscamos.
Ten en cuenta además:
- Si está en Facebook, puedes tener amigos comunes.
- Si está en Facebook puede haber dejado un «rastro» fácil de seguir.
- Si está en Facebook es porque, en cierto sentido, le va la marcha.
2. INSTAGRAM
Buscando por nombre las posibilidades se reducen porque la gente utiliza alias y diminutivos como CAMT72 (Carlos Andrés Mellado Tejero, que nació en 1972) o Lorem_ipsum (aunque se llame Lorena) y además, muchos usuarios tienen el canal completamente privado, por lo que no podremos ver ni una foto en tamaño grande. Ni siquiera la de perfil, ya que no es posible ampliarla. Te estamos imaginando armado con una lupa como un detective que vivía en Baker Street. Sin embargo, hay luz al final del túnel… Instagram tiene hashtags y geolocalización, así que en ese aspecto nos ofrece muchísimas posibilidades de Facebook, sobre todo para encontrar a personas del grupo 3, los inencontrables.
3. TWITTER
Esta red tiene más posibilidades de las que pudiera parecer. Sobre todo, si notamos esa chispa en un lugar y momento concreto: en un evento de emprendedores, en un concierto o en una ponencia. Solo necesitamos saber cuál es el hashtag del evento para hacer una rápida búsqueda y quizás haya subido una foto. Por nombre y apellidos también podemos buscar aunque la gente se pone cualquier cosa como usuario…
Aunque la persona no sea muy activa en redes quizás sí lo sea su acompañante así que ponte a buscar como un poseso en los retweets y favs de los tweets relacionados con el evento. Si ya localizas a su acompañante, dirígete a sus seguidores. Quizás no es alguien muy activo en redes sociales, pero quizás algún día sí lo fue y se creó un perfil para seguir a su amiguit@. Ahí tendremos un perfil con nombre y apellidos y una foto de carné, bien visible para que le distingamos bien. Un DNI en toda regla y con solo dos tweets: Hola mundo, y la foto de un Koala comiendo bambú. Un perfil digno de jubilad@ que no puede ni imaginarse la de gente que busca a otras personas en internet y que por ello facilita toda la info que le piden sin ningún reparo.
4. LINKEDIN
¿Quién busca a alguien en LinkedIN? Te podemos aconsejar un poco, aunque ya te advertimos que nos pareces nerd de antemano. Si sabes en qué empresa trabaja puedes buscar esa organización y ahí te aparecerán los usuarios que la tienen puesto como lugar de empleo actual y el área geográfica a la que pertenecen.
Por cierto, ¿no serás de los que lo pronuncia «LinkeTin»?
5. SNAPCHAT:
Tira los dados…
Este artículo está escrito en clave de humor por JL y DC